Tombuctú ha caido en manos de extremistas religiosos. En los aalrededores Kidane vive tranquilamente en las dunas con su esposa Satima, su hija Toya e Issam, un niño pastor de doce años...

Título:	TIMBUKTU
Tit. Orig.:	TIMBUKTU
Nacionalidad:	FRANCIA, MAURITANIA, 2014
Dirección:	ABDERRAHMANE SISSAKO
Guión:	ABDERRAHMANE SISSAKO, KESSEN TALL
Fotografía:	SOFIAN EL FANI
Música	AMIN BOUHAFA
Interpretes:	IBRAHIM AHMED, TOULOU KIKI, ABEL JAFRI, FATOUMATA DIAWARA, HITCHEM YACOUBI, KETTLY NOEL, MEHDI AG MOHAMED, LAYLA WALET MOHAMED, ADEL MAHMOUD CHERIF, SALEM DENDOU
Censura:	NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 12 AÑOS
Duración:	96 MINUTOS

 Por  PACO CASADO

   Tombuctú ha caido en manos de extremistas religiosos. En los aalrededores Kidane vive tranquilamente en las dunas con su esposa Satima, su hija Toya e Issam, un niño pastor de doce años.
 La ciudad está atemorizada, y los habitantes en su vida cotidiana padecen el régimen del terror impuesto por los yihadistas, que entre otras barbaridades cometen la brutal lapidación de una pareja de 30 años y con dos hijos, por no estar casada, suceso ocurrido el 29 de julio de 2012, ante centenares de personas en la ciudad maliense de Aguelhok, acto que tuvo una gran repercusión en los medios informativos.
  Entre la leyes que imponen los yihadistas está prohibido el adulterio y entre otras cosas más superficiales fumar, tomar alcohol, reír, jugar al fútbol, cantar, reunirse, escuchar música (le cuesta a una chica cuarenta latigazos), las mujeres deben llevar guantes en las manos y calcetines en los pies y por supuesto el velo para cubrirse el rostro.
 La película se inspira en un hecho real, la lapidación, que fue el punto de partida que llevó al director mauritano a realizarla, y lo que le empujó a hacerse eco de esta historia.
 Cada día, unos tribunales improvisados lanzan sentencias tan absurdas como trágicas debido a la intolerancia del inhumano fanatismo islámico.
 El caos que reina en Tombuctú no parece afectar a Kidane, uno de sus habitantes, hasta el día en que accidentalmente mata a Amadou, un pescador que ha acabado con la vida de GPS, que así se llama su vaca favorita, por beber en el río donde él tiene puesta sus redes.
 Ahora Kidane debe enfrentarse a las leyes impuestas por los ocupantes extranjeros, reconoce su delito y está dispuesto a morir, pero lamenta no poder ver más el rostro de su hija.
 El director mauritano, asiduo de los grandes festivales y uno de los pocos africanos de reconocimiento internacional, cuenta en 'Timbuktu' el combate silencioso y digno de hombres, mujeres y niños cuyas vidas y libertades han sido expoliadas por los yihadistas que asolan el poblado en el que antes vivían felices.
 La crueldad de las situaciones donde no se ven colores, nadie ríe y las mujeres son sólo sombras, contrasta con la hermosura de los paisajes y sus habitantes.
 Es cine político ya que muestra lo evidente del laicismo como acto de resistencia, la más cruel imperfección del mundo que se mantiene a una distancia prudente en una denuncia llena de buenas intenciones, con el salvajismo de la fe impuesta a la fuerza, haciendo cumplir a todos las estrictas normas de la sharia o leyes islámicas como la entienden los fundamentalistas.
 Los que las incumplen son castigados a latigazos y llegado el caso a la muerte siendo lapidados en nombre de Alá.
 El film no pretende demonizar ningún credo sino hacer un canto triste al respeto humano.
  Para ello utiliza varias historias que van de la comedia al drama, sobresaliendo especialmente estas últimas ya que muchas de las cosas que vemos no son para tomárselas muy a broma.
 Es la primera cinta de Mauritania que ha sido nominada al Oscar a la mejor en idioma no inglés, que interesa por lo bien que está filmada y por lo que representa de los excesos del fundamentalismo islámico, con un guion algo disperso que condena la intoleranza y la violencia de forma nada maniquea.
 Una película sencilla de denuncia cuya desgarradora fuerza sobrecoge al espectador desde el primer momento, que está interpretada por actores en su mayoría no profesionales.
 En el Festival de cine de Cannes logró el Premio François Chalais y el de la OCIC. Hugo de plata a la direccion en el Festival de Chicago. Premio espíritu por la libertad en el Festival de Jerusalem. Ocho nominaciones a los César.